Muere jaguar negro en el Zoomat. Falta de equipo lo mata.

Falta de cultura de los visitantes y equipamiento insuficiente pudieron dar como resultado el fallecimiento de Ixchel

Antony Flores Mérida

Tuxtla Gutiérrez.- Ixchel, un ejemplar de jaguar negro hembra que tenía más de un año en el Zoológico Miguel Álvarez del Toro de la capital, falleció el pasado domingo 20 de septiembre luego de complicaciones derivadas de una oclusión intestinal.
El espécimen melanizado de tres años de edad y que vivía en el recinto chiapaneco desde febrero de 2008 había estado enfermo desde finales de julio.
Pero, más allá de los problemas intestinales que derivaron en la muerte del animal, podrían haber sido la falta de equipo adecuado para el diagnóstico por parte del Zoomat y la poca cultura de los visitantes que suelen arrojar comida u objetos a los encierros, las que habrían por una parte, evitado salvar la vida del jaguar negro y, por otra, provocado las complicaciones que le quitaron la vida.
Froylán Esquinca Cano, director del Instituto de Historia Natural (IHN), explicó la muerte de Ixchel, un jaguar de tres años que había llegado a Chiapas el 9 de febrero de 2008 como parte de los intercambios que realiza el Zoomat y que estaba destinada a la reproducción con Jojk, con miras a lograr nuevos ejemplares melanizados.

Larga y dolorosa agonía

Según los datos aportados por el IHN, el 28 de julio se reportó enfermo al animal. Veterinarios del Zoomat explicaron que en cuanto se tuvo reporte del estado del felino, se realizaron las primeras revisiones y evaluaciones para determinar la necesidad de anestesiarlo y hacer un análisis a profundidad.
“Presentaba un cuadro depresivo con anorexia intermitente, ante el cual, se estuvo en constante observación y se ajustó su dieta continuando en observación. A partir de ese momento [28 de julio] se le suministraron antibióticos y desinflamatorios”. Pero las condiciones de Ixchel empeoraron, ante lo cual, el IHN solicitó a la Universidad Autónoma de Chiapas (Unach) la asistencia con equipo de ultrasonido para realizar estudios al jaguar programándose las primeras revisiones para el 31 de agosto, más de un mes después del primer reporte de enfermedad.
Romeo Morales Espinosa, cuidador general de Nutrición y Salud Animal, explicó que desde el primer momento se realizaron estudios, pero la falta de equipamiento del Zoomat hizo imposible ahondar en el tema.
Aceptó que, de haber contado con un equipo de ultrasonido propio, se habría descubierto el “tapón” intestinal que afectaba al felino y así, salvarle la vida.
“Contamos con un aparato de rayos equis que desgraciadamente ya tiene muchos años y cuando quiere, saca las radiografías y cuando no, no; al hacerle el análisis clínico se le hizo un perfil hepático, una química sanguínea general y nos dimos cuenta que estaba deshidratado, que tenía una severa infección, pero hasta ahí no podíamos saber que estaba obstruida. Hasta que pudimos contar con el apoyo de la Unach y hacerle el ultrasonido pudimos detectar que tenía el tapón y un problema ya en riñones”.
Ixchel tenía una obstrucción duodenal y daño renal, con el diagnóstico se decidió aplicar un enema para humectar y deshacer la obstrucción y terapia de fluidos, a la cual se sumó la necesidad de una intervención quirúrgica que tomó tres horas de trabajo en quirófano. Mas, no fue suficiente.
El tratamiento estaba por dar resultados y ante las buenas expectativas, los médicos decidieron realizar una nueva intervención para el lunes 21 de septiembre, pero Ixchel no resistió mas y falleció a las 9 de la mañana un día antes de su nueva operación. “A nosotros nos pega mucho no tener el equipo porque diagnosticar al ojo es muy difícil, sobre todo una obstrucción” finaliza Morales Espinosa.
Pero la muerte de Ixchel pudo haber tenido su origen en la falta de cultura de los visitantes.

Plástico, zapatos, cinturones: ninguno es comida

El director del IHN, Froylán Esquinca, lamenta que, aunado a la falta de equipamiento, los visitantes abonen a la mala salud de los animales lanzando comida chatarra a los encierros. Pero en otras ocasiones se han encontrado bolsas de plástico, zapatos o cinturones. En el caso del jaguar negro hembra que falleció, había un antecedente que pone sobre alerta a los veterinarios: plástico.
“Hubo un evento en febrero… en agosto (sic), donde se identificó una bolsa de plástico, vomitó plástico y se cree que éste pudo haber sido un primer elemento pero todo lo que salga de [los análisis] histopatología nos van a decir si hubo rastros de tracciones en el esófago o en el estómago, pero eso es parte de lo que tenemos que evidenciar médicamente”.
Los veterinarios ya realizaron una necropsia al ejemplar para identificar qué pudo haber causado la obstrucción intestinal que le provocó la muerte, pero el antecedente del plástico en el vómito ha encendido un foco rojo en la administración del IHN que considera la necesidad de aumentar la capacitación de los trabajadores para la vigilancia, pero también, impulsar una mayor cultura entre los visitantes para evitar futuros sucesos.
“Hay que comprender la situación de un zoológico, que tiene que enfrentar las modernidades, desde las enfermedades. El mismo asistente al zoológico debe tener más cuidado, hemos encontrado zapatos, cinturones, bolsas de plástico que avientan a las exhibiciones, entonces es un tema de convocatoria también a reforzar la actitud de quienes nos visitan, no solo es el ejemplar sino también que ésta es una relación de hombre y naturaleza que lleva a un concepto de cultura y educación”.

Sobreviven cuatro jaguares en el Zoomat

Con la muerte de Ixchel, el Programa de Manejo y Reproducción del Jaguar con que cuenta el Zoomat no se detiene, aunque el IHN lamenta la pérdida del felino que provenía del Parque Centenario, de Mérida, Yucatán y que estaba destinada a reproducirse con Jojk.
Son cuatro los ejemplares que existen todavía en el recinto, una hembra que “sustituirá” en exhibición a Ixchel y que, según Froylán Esquinca, podrá ser nombrada por los propios visitantes a través de una convocatoria que se lanzará en el momento en que salga a exhibición.
Sin embargo, la nueva hembra de jaguar no es melanizada, aunque no se desestiman las posibilidades de su reproducción con Jojk. Otro ejemplar más –hembra- se encuentra en cuarentena y en breve podría ponerse también en exhibición.
En tanto, el IHN seguirá trabajando en los programas de manejo pues son una prioridad para el recinto.
“El objetivo sigue vigente, es cómo lograr posicionarnos en un tema que no solo sea la reproducción y exhibición sino también el manejo del jaguar a nivel sureste, trabajamos en ello así como con el tapir, son temas prioritarios y cómo tener un organismo en exhibición no es solo tenerlo de muestra, sino la serie de investigaciones que implica”.
Así mismo, Froylán Esquinca Cano destacó que existe disposición del gobierno del estado para dotar del equipamiento necesario al Zoomat y evitar, en el futuro, nuevos incidentes de este tipo.